Comentario a Carta Publicada por el Embajador de Israel en la República Dominicana

“Un Estado que vive despreciando la justicia pierde la fuerza necesaria para sobrevivir.”
Michel Warschaswski

El 21 de julio del 2006, fue publicada en el periódico El nacional una carta por parte del embajador de Israel en la Rep. Dominicana, Yoav Bar-On, que él titulaba: “El esclarecimiento en el crucigrama Medio Oriental”. En dicha carta, este decía que su país (Israel) era tratado de una manera irracional e injusta por la prensa y se quejaba de la falta de análisis crítico, pero cualquiera que lea la carta se dará cuanta que a quien le falto análisis crítico fue a él.

Si bien, entiendo la posición del embajador: es israelita por un lado y por otro representante oficial de su país en la Rep. Dominicana; me parece hipócrita en demasía e incluso una burla a mi intelecto lo que argumenta en su misiva, porque no entiendo como este individuo se atreve a decir que Israel es atacado por grupos terroristas, cuando es el Estado de Israel el que práctica desde su fundación un terrorismo de Estado, y Palestina no ha hecho más que defenderse de los ataques contra ellos cometidos y de una injusta ocupación provocada y apoyada por los Estados Unidos de Norteamérica sobre un pueblo que no ha hecho más que defender lo que hasta 1948 fue su patria y su hogar, pero que a partir de dicha fecha se ha convertido en territorio de guerra, matanzas y atentados de uno y otro lado; y todo esto tan sólo por el capricho de un gobierno y de un Estado (EE. UU) que se empeña en ubicar al pueblo judío en este territorio; territorio, que si bien, en un periódo histórico les perteneció, en la época en que estos lo ocuparon ya hacia mucho tiempo que no les pertenecía.

“Durante sesenta años en nombre del judaísmo y para salvar del genocidio europeo a los judíos, el Estado de Israel viene perpetrando atrocidades sin límites en la población Palestina.
El horror que vive el pueblo Palestino desde 1948, una ocupación en nombre de supuestos designios bíblicos, tiene sometida a toda esa franja de Medio Oriente a la brutalidad demente del estado de Israel”.
Nada mas cierto y acertado que esta frase dicha por Kathleen Cristison, una ex analista miembro de la CIA acerca de la situación que se produce en medio Oriente debido a la ocupación y a las acciones del Estado Israelí.

Es irrisorio para mi que este señor se atreva a referirse en dicho escrito, tanto al Líbano como a Palestina como Estados que no tienen voluntad propia, cuando el mundo sabe que hablar de Israel y de Estados Unidos es prácticamente lo mismo; así como el decir que el pueblo hebreo desea y lucha por la paz, que si bien puede ser cierto (en la parte del deseo), no es lo este Estado demuestra en sus acciones, ya que este mantiene desde sus inicios una política de terror, con el apoyo de una potencia mundial (EE. UU.) lo que Palestina no tiene.

Israel está exterminando al pueblo Palestino de la misma manera que los nazis lo exterminaron a ellos desde 1930 hasta 1945, todo esto con el apoyo de los EE.UU. y el silencio de la Comunidad Europea. Aquí el pueblo Palestino, veáse como quiera verse es el único agraviado. Y el que opine lo contrario que me diga qué haría, si como pueblo Palestino viera su casa, su hogar, ocupada por extraños, quienes le tratan como si los ocupantes fueran ellos y no al contrario, y que pese a todo lo anterior no cesan de atacarle y de privarle de los que por derecho les corresponde.

En verdad, para mí, dicha carta y toda el conflicto que se produce en Medio Oriente, a causa de esta situación es indignante; y yo sólo me pregunto hasta cuándo? Cuándo habrán muerto suficientes personas para que tanto Estados Unidos como Israel se den cuenta de su error?? Hasta cuando la Comunidad Internacional y la ONU permanecerán en estado de silencio y de indeferencia ante un conflicto que cada vez se está haciendo mayor y que desde sus inicios es un crimen es un lesa humanidad, donde ellos con su silencio e indiferencia se han convertidos en cómplices???

La Política como yo la veo...

Política, palabra proveniente del griego politiké, que de acuerdo a la Gran Enciclopedia Larousse es la ciencia que se dedica al estudio, consolidación y distribución del poder político. Ahora bien qué es la política en la realidad, o mejor dicho qué es la política en la realidad dominicana. Pues muy fácil, en la realidad dominicana y también en la realidad mundial, aunque solo me referiré a la dominicana por ser la que yo vivo, la política no es mas que una manera fácil de hacerse de rico en poco tiempo. Viene a ser mas o menos como sacarse el lotto, con el pequeño inconveniente de que conlleva una mayor inversión que comprar un ticket pero con mucha mas ventajas, como la probabilidad de ganar, que es mucho mayor en política (muchas más si la candidatura es a diputado), así como también el hecho de que no sólo se gana mucho dinero en poco tiempo, sino que también se gana poder, lo que aún mejor que le dinero en cierto sentido, y lo que garantiza una gran cantidad de súbditos y personas deseosas de ganar la amistad del espécimen conocido como político.

El político es aquel individuo que supuestamente proviene del pueblo y que lo único que desea es el progreso de este, por lo que luchará mientras tenga el poder para lograr esto. Eso, por lo menos, es lo que todos dicen. Ahora bien, en verdad el político no es más que un charlatán, dispuesto a decir cuantas mentiras sean necesarias, para alcanzar el tan codiciado poder y así poder lograr sus objetivos y metas personales.

“Los políticos pese a sus diferencias exteriores y a pertenecer a partidos distintos son miembros de una logia muy exclusiva, en donde se apoyan y acuden por todos los medios para obtener su parte del botín, que recientemente se manifestó en la repartición descarada de fondos públicos, supuestamente para cubrir los costos de una campaña política, pero que finalmente se convierten en vehículos, residencias, viajes y gastos ostentosos en amantes, restaurantes, etc. Nadie les exige cumplir con los requisitos de una contabilidad organizada y confiable y no le temen a ninguna auditoria oficial ya que nadie se atreve a pedirles cuentas.”[1]

Eso no le dije yo, pero que acertado, no?, ya vieron hasta se habla de botín para referirse al Estado. Y en cuanto a las auditorias aunque las hicieran, quienes la hacen?? Personas que han sido designadas por quienes?? Políticos, que casualidad!!!

Por todo lo anterior dicho no deben ustedes asombrarse de la cantidad de personas que son políticos, pero mucho menos deben asombrase de que nuestro país esté como está, porque el único y verdadero fin de todo político no es como ellos dicen el progreso del pueblo, sino mas bien el progreso propio y personal, y si no es muy egoísta, también, el progreso de su familia, y de los compañeros del partido, y de nadie más.

Ahhhh, si quieren no crean nada de lo que les digo, simplemente lean un poco de historia, o más fácil aún, lean los periódicos y se darán cuanta ustedes mismo de cual es la realidad.
Es más, escribiendo esto, me he dado cuenta lo conveniente y provechoso de la política, así, que quizás me dedique a eso, si lo hago, ya verán lo pronto que estaré bien montada, bien vestida, y sobre todo acompañada por un montón de lambones queriendo ser mis amigo.

[1] Fabio Herrera- Miniño. El Estado: patrimonio de los políticos. Periódico Hoy. Viernes 21 de julio del 2006

Mas cavilaciones... Ayer mientras caminaba....

Ayer mientras caminaba solitaria, empecé a pensar en el pasado, recordé hechos y personas, y mientras lo hacía me di cuenta de cuan falsos son nuestros pensamientos, nuestra memoria.

Cuan a menudo nuestra mente nos engaña, y creemos recordar algo, recordar a alguien, algo que talvez nunca pasó, alguien que tal vez nunca conocimos.

Si nos detenemos realmente, si analizamos con detenimiento nuestras memorias podríamos darnos cuenta de que mucho de lo que creemos recordar no son mas que deseos, sueños, pensamientos, todos entrelazados entre sí, y que nuestra mente, nuestro cerebro se ha encargado de hacernos creer que son parte de nuestra vida, que los hemos vivido.

Es triste ver, como muchos de nosotros llegamos incluso a basar nuestra vida en eso que llamamos recuerdo, en eso que creemos hemos vivido, en esa mentira, parte de nuestra existencia, mentira intrínseca, que nos hace ver nuestra verdadera naturaleza de seres que de una u otra forma no viven mas que una ficción, una realidad que creemos real pero que es falsa, que no es mas que un espejismo, la sombra en la oscuridad de la cueva, en la oscuridad de nuestras vidas que ilusoriamente creemos iluminada.

Pero, ¿iluminada de qué? ¿De nuestros recuerdos? ¿De nuestros pensamientos? Todas ficciones, todas ilusiones, falsedades.

A veces causa risa ver como el hombre actúa, ver como actuamos impulsados por nuestros sentimientos, otra ficción, otra ilusión creada por el hombre para engañarse a si mismo, para hacerse mas soportable la vida, para hacerla mas llevadera.

Y es que sino fuera por todas estas mentiras, tal vez nos seria imposible vivir en este mundo, en el que una y otra vez nos encontramos confundidos, perdidos.
Este mundo sin sentido al que nosotros mismos debemos encontrarle el sentido, o quizás seria mejor decir inventarle un sentido.

Por esto no se puede criticar las religiones, estas no son mas que una forma, un método, un invento de el hombre, para tratar de encontrarle o de crearle ese sentido a la vida, y es también por esto que aunque resulte difícil aceptarlo muchos son felices siguiendo estas religiones, que le dan ese falso sentido a su vida, y le hacen ignorar los problemas, que le rodean y agobian, es por esto que estas personas, a pesar de todo lo que se les pueda criticar son casi siempre más felices que nosotros los que hemos decidido tratar de encontrar la luz, la verdad, y dejar de ocultarnos tras dioses, religiones e ideologías.

Fuera mucho mas fácil tratar de ser normal, hacer lo que los otros, y no buscar la verdad detrás de esto, pero, lo cierto es y creo que por es eso que muchos renunciamos a esa normalidad, es que, es mucho mas interesante, mas provocador, ser la contradicción, hacer la diferencia, molestar al otro con nuestra muy particular forma de no aceptar la vida mas que como una gran interrogante que nunca terminaremos de responder y que incluso talvez ni siquiera nos interesa responder.

Y es que a veces, es mejor vivir sin saber, a veces es mejor seguir mintiéndonos, seguir viviendo una ficción, sea cual fuere esta.